El paso, que estará habilitado en la primera semana de agosto, ya fue hormigonado y deberán cumplirse los 20 días necesarios para permitir el tránsito vehicular.
Los operarios de la cuadrilla de la Secretaría de Obras públicas informaron al jefe comunal sobre el avance de la obra y confirmaron que el puente tendrá dos pasarelas, una a cada lado de la estructura principal.
Una de las pasarelas tendrá un ancho de 1,50 metros y la otra será de 1,10 metros. Ambas darán más seguridad a quienes transiten por la zona, ya que la vieja estructura no tenía pasos peatonales independientes por lo que el cruce de personas se realizaba por la calzada.
Ante la pregunta del intendente sobre el estado de la estructura anterior, los operarios informaron que las vigas de acero estaban apoyadas sobre rollizos de gran porte de roble pellín, por lo que se decidió remover esas bases.
La semana pasada, la Secretaría de Obras Públicas había informado que, como resultado del desarme de la estructura, se detectó que el paso debería ser reconstruido para garantizar la seguridad en la circulación de vehículos y personas.
Por esta razón se decidió extraer los rollizos con motosierra para ejecutar los nuevos apoyos de hormigón armado, previo apuntalamiento de las vigas de acero.
Las tareas de la última semana incluyeron la finalización del hormigonado, el recambio de tirantes de 4″x 10″ y la carpeta de rodamiento de hormigón con las pasarelas.
Este puente fue construido hace más de 35 años, cuando se instalaron sobre Los Cipreses las primeras viviendas en la zona. El paso vehicular, que al principio era sólo para los vecinos, con el tiempo se incrementó y actualmente registra un alto tránsito en la zona